El cerezo es un árbol originario de Europa, Asia occidental y norte de África, que pertenece al género Prunus, de la família Rosaceae. Los cerezos cultivados para producir cerezas provienen de la selección de las especies Prunus avium y Prunus cerasus, y el cruce entre ellas. Las flores son blancas, con cinco pétalos, agrupadas en corimbos. Esta floración tiene lugar antes de la aparición de las hojas. Los frutos, las cerezas, se desarrollan pasados dos meses. El cerezo puede vivir unos 100 años y es muy resistente al frío del invierno. Por la belleza y delicadeza de las flores, el cerezo se asocia con los caballeros a parte de con el buen tiempo. Las flores son ligeras y vuelan con el viento, como la vida. Se utilizan las flores para decoración pero también para el tratamiento de algunas enfermedades, especialmente como infusión debido a sus propiedades diuréticas. Los griegos y los romanos difundieron extensamente el cultivo de los cerezos. Parece que proviene de la antigua colonia
Pensaments espirituals de la Germana Núria de Betània